miércoles, 31 de diciembre de 2008

2009 momentos felices

Llevo muchos días pensando en este post, y en cómo felicitar el año. Y entre todo lo que me venía a la cabeza he decidido compartir con vosotros algunas imágenes recogidas en casa a lo largo del año. Siempre en el mismo escenario, que muchos reconoceréis. Todas diferentes, enseñando un poco de cada uno, y un mucho del momento que estábais viviendo en vuestracasaenlisboa. Este álbum es un recuerdo de muchos de los buenos momentos que todos hemos pasado en esta casa:


En el post de fin de año 2007 "El enterrador de sueños" escribió una reflexión que entonces encontré algo triste, pero que hoy está para mi completamente al día "Aunque el día a día nos arrolle, que no consiga borrar los recuerdos de esos momentos que nos hacen sentir vivos. Gracias por recordar".
Hoy te doy yo las gracias, "enterrador", por ese pensamiento. Espero que el recuerdo de estos buenos momentos os haga a todos sentir un poco más vivos.

Hoy no sólo os deseo un 2009 cargado con la energía de vuestras risas,
os deseo también un año repleto de buenos momentos
que nos hagan sentir vivos...

... como éstos con los que hemos empezado

martes, 2 de diciembre de 2008

Antes de Navidad, una historia de verano

LEER + B = REBEL
Este verano se alojaron en casa Berta y César con sus tres niños: Bruno, Sara y Teo. Venían bien recomendados y aunque no nos conocíamos, congeniamos desde el primer momento, o incluso antes por mail. En sus paseos por el Castelo se encontraron un tesoro tipográfico: una colección de letras viejas tiradas en la calle que no conseguían traer a casa sin coche. Les acompañé una mañana en busca del tesoro, y me quedé prendada de las letras preciosas. Las cargamos todas en el coche:
B + R + L + E + E


Al llegar a casa nos dedicamos a limpiarles la mugre de la calle. Ellos sólo querían la B para Bruno, el resto eran un regalo para micasa. Mi sorpresa fue enorme al comprobar que las letras restantes tenían todo el sentido del mundo. Decidí colgarlas en el cuarto en que habían estado alojados que además está lleno de libros. L + E + E + R = LEER Unos días después cumplía años mi amigo Nuno, y me acordé de que lleva tiempo buscando algo parecido a estas letras para colgar en su jardín. Y decidí regalarle una de ellas, que además de coincidir con la inicial de su apodo, dejaba en casa una palabra con sentido: L + E + E - R = LEE

Cuando el día del cumpleaños en medio de la calle enseñó al resto de los amigos el tesoro tipográfico que le había regalado, uno de ellos se dio cuenta de que era una letra de un andamio de su empresa, que había estado colocado muchísmos años en una casa de Castelo B + R + L + E + E = REBEL

Unos días después, fui a esos almacenes, y me quedé con otros pequeños tesoros tipográficos, que he ido repartiendo entre algunos amigos a los que también les encantan estas cosas, como Edurne, que tiene una colección de letras E encontradas, Carlos, al que le gusta la tipografía casi tanto como a mi, o María, que estaba con nosotros aquel día que recogimos las letras de la calle.

En el cuarto azul vuelve a estar escrita la palabra completa: LEER, y se nota que la R está más nueva, que el azul es más intenso. Podría pedirle a Nuno que me la cambiara por la suya, pero creo que así se mantiene viva la historia, que me parece preciosa, porque, sobre todo, habla de la generosidad de Berta, César, Bruno, Sara y Teo, que compartieron su hallazgo con micasa y con todos vosotros, y de João, que al ofrecerme las letras en desuso de su almacén, me ha ayudado a hacer un poco más felices a unos cuantos amigos.

martes, 4 de noviembre de 2008

comentarios sin sospecha

A finales de agosto se publicó un comentario en TripAdvisor sobre micasaenlisboa. Lo firmaba mmhbcn y por las fotos, creí averiguar quien era. Precioso comentario y preciosas fotos. Todo mi agradecimiento.


Se me ocurrió compartirlo con algunas personas, con lo que provoqué que muchas de ellas descubrieran esta estupenda página en la que viajeros de todo el mundo dejan sus opiniones sobre los lugares que visitan.
Uno de vosotros me alertó: un huésped al que micasa no gustó había publicado un artículo al respecto bastante duro, y
fuera de la realidad según todos los que me contactáis al respecto. Vuestras reacciones fueron inmediatas: muchos respondisteis a ese foro con vuestras opiniones que cuestionaban las de aquel huésped. El problema fue que lo hicisteis varios al mismo tiempo, y la dirección de TA consideró que era yo, desde distintos mails, quien estaba escribiendo todas esas respuestas. Incluso eliminaron aquel primer comentario precioso.
Me tuve que poner a la tarea de responder al huésped descontento en su foro (desoyendo el consejo de mi padre de "no hay mejor desprecio que no hacer aprecio") para evitar que aquello se me fuera de las manos.
Escribí a la direción de la web varias veces, y por fin, hace unos días me contactaron: estaban recibiendo muchos artículos sobre micasaenlisboa en pocos días, y pensaban que yo estaba detrás de todos ellos. Ha sido muy sencillo explicarles lo que estaba pasando: bastó contarles que detrás de cada uno de aquellos comentarios normalmente está una persona a la que me une una relación especial de cariño. La mayor parte de los que pasáis por aquí entendéis que lo que me mueve a tener las puertas de micasa abiertas es, sobre todo, el deseo de hacer la vida agradable a los demás compartiendo este pequeño tesoro que se vive dentro de casa y a través de las ventanas que miran a Lisboa.

Lo han procesado muy bien. Incluso en su último mail se disculpaban diciendo que entendían mi impotencia ante lo que estaba pasando. Hasta han vuelto a publicar aquel primer comentario.
Seguramente la forma de estar y de convivir en micasa está generando un tipo de huésped que a los empresarios de hostelería tradicional se les escapan, y a las guías de viajes también. Yo prefiero manteneros así, y no tener una base de datos de clientes, sino de amigosdemicasaenlisboa.

sábado, 20 de septiembre de 2008

otra forma de ver Lisboa

La primera visita del verano fueron Carlos y Pedro. Carlos es parte de esta casa, pero llevaba bastante sin venir a relajarse. Para Pedro era la primera visita. Me dieron la oportunidad de hacer turismo, y no de cualquier clase: diferente, agradable, placentero. Un par de semanas más tarde vino Miguel desde México, y con él y con Nuno tuve la oportunidad de seguir haciendo turismo de esta otra clase. Aquí van algunas de las propuestas de esos dos fines de semana:
Viernes por la tarde: coger el barco en Cais de Sodré hasta Cacilhas para ver atardecer tomando una caipirinha en Atírate ao Río. Vuelta en barco y cena tranquila en A Margem.

Sábado: descanso del desayuno con remoloneo intenso en micasaenlisboa, paseo por el Chiado para ver una expo de arte cinético en el Museo do Chiado y compras en A Vida Portuguesa y en París en Lisboa. Comida ligera en Bernard de la Rua Garret. Excursión a Praia de Meco a dormir la siesta, ver atardecer, y una nueva caipirinha en O Bar do Peixe. Vuelta a Lisboa y cena fantástica en Luca, como siempre.

Domingo: más remoloneo en micasa. Visita al CCB y la expo sobre Le Corbusier: nos faltan horas, ya que hemos quedado para comer en Comporta. Comida maravillosa en una compañía inmejorable en Comporta Café, siesta al sol, y penúltima caipirinha en mejor compañía todavía. Vuelta en el Ferry de Troia viendo el "pôr-do-sol" en cubierta. Cena en el jardín de micasa.

Sábado: visita mañanera a la Ellipse Foundation en Cascais. Comida en Praia Adraga. Excursión a Mafra para ver el Convento y sentirte un poco parte de la historia de Portugal. Cena en Pap Açorda y copas en el Barrio Alto sin hora.

Domingo: excursión a las praias de la linea en tren. Tarde de final de eurocopa en casa de un amigo (con bandera de España), y paseo con cena por Alfama, en Santo Antonio.

No es necesario darse una enorme paliza para disfrutar de esta ciudad: ofrece miles de alternativas que se escapan de las guías de viajes.
Los que venís a micasa tenéis un cuaderno en vuestra habitación para leer con las experiencias de los que os han precedido. Y si no, tenéis mi experiencia, y la de los amigos que suelen pasar por casa cada día.

regalar Lisboa

Esta vez han pasado más de 2 meses, y creo que no soy un completo desastre: escribir este blog tiene que ser placentero, no una obligación. Por suerte el verano ha estado lleno de obligaciones (y de placeres) que han dejado poco tiempo libre.
Ha sido un verano lleno de visitas, reencuentros, descubrimientos, y partidas. Me pongo un poco melancólica al observarlo ahora como ya pasado. Lo más importante es que tengo conciencia de haber(me) aprovechado mucho (de) las visitas, tanto de los conocidos como de los repetidores o de las nuevas adquisiciones:
Empezó con una visita de fin de semana de Carlos y Pedro que merece capítulo aparte (llevo pensándolo desde el 8 de junio, y va a ser la siguiente entrada). Esta fue, sobre todo, una posibilidad de hacer turismo diferente.
Mi madre vino a pasar una semana. No consigue convivir con Lola, y para mi es muy difícil tener que prescindir de una cuando viene la otra. Esta vez lo he llevado bien (Lola en hotelito), y se nos ha hecho muy corto. Buena señal.
Han venido 3 de mis 6 sobrinos: Marta (14) la primera, sola desde Córdoba, escapándose un poco de la rutina de 4 hermanos, nos ha preparado unos brownies de chocolate hipercalóricos, ha sido una perfecta canguro alguna noche, y ha disfrutado con todo lo que hacía, playa, Lola, o rebajas. Jaime y Nano (12 y 15) venían a darse un garbeo y si cae algo de surf, estupendo, pero sobre todo venían de vacaciones, y ya me encargué yo de que pintaran las paredes del jardín y echaran una mano a cambio del alquiler de las tablas de surf. Ha sido estupendo disfrutarles, no tengo muchas oportunidades a lo largo del año, así que he decidido que a partir de ahora tendrán como regalo anual un billete de idayvuelta para venir a sucasaenlisboa
Han venido dos AMIGAS de esas pocas que existen con mayúsculas a pasar unos días conmigo. María viene de vez en cuando, este año van 3, y parece que le engancha. Nos disfrutamos bastante mutuamente, y esta vez creo que ha sido bastante intensa la visita, además me dejó 2 amigos nuevos antes de irse: Paco y Maga. Candela era la primera vez que venía, y ha sido la primera vez que convivíamos: hace 30 años que nos queremos, y esta primera oportunidad nos ha acercado bastante al universo particular que llevamos dentro. No han coincidido, pero se habrían encantado.
Han reincidido Leticia, Kari, Camino&Bernie&Caminito&África, Elise, Carlos, Odile, Marga, Pepa, Carmen&Alberto, Luis, ...
Hemos incorporado muchas adquisiciones nuevas, entre las que voy a incluir aquí unas pocas: Melánie&Christophe, Los Vizcaínos, Berta&César&churumbeles, Ana&Iván, Elena&Tolo, Silvie&Jean, Francesc&Raúl&Aitor, Miguel, ...
Lo mejor de todo es que por distintas vías seguimos en contacto, y cada vez que llega un mensaje en el mail, o una postal desde Sicilia, o un CD con fotos de Lisboa, o una crítica en TripAdvisor, es un pequeño regalo que me hacéis. Muchos decís que esta casa es un regalo. El regalo sois vosotros. Espero que os sigáis regalando Lisboa.

miércoles, 16 de julio de 2008

casualidades que sonríen

El 12 de julio hizo 8 años que Lola apareció en mi vida. No me imagino esta casa ni mi vida sin ella. Se nota que estos días la echo de menos (está en el "campamento de verano"). Desde que apareció ha sabido ganarse a todos los que me rodean, y no sólo a mi. La mirada zalamera, la gracia que siempre sabe hacer a tiempo, sus movimientos de orejas o de rabo, dar la patita en el momento oportuno, posar para las fotos. . . (me estoy pareciendo a una abuela con gato ¡qué horror!)


El 1 de julio abrí las puertas de todas las habitaciones de casa. Y la primera pareja que llegó (casualidad de la vida) venía de celebrar su boda en Bilbao en un hotel que dirigía un amigo mío. Borja y Victoria adoptaron a Lola, y Lola les adoptó a ellos desde el primer momento. Eso me hizo pensar que las cosas empezaban bien. 10 meses más tarde, paseando por Madrid me los encuentro con un bebé que, al parecer, ya les acompañaba en micasa. Estábamos en la puerta de mi tienda favorita, que también es su tenda favorita. Y ella trabaja en una galería maravillosa, en la que exponen uno o dos de de mis fotógrafos favoritos. ¿Casualidades?

Hace más o menos un año llegaron a casa Yamila y Daniel desde Madrid. La casualidad hizo que les colocara en el cuarto que está lleno de libros de diseño, y claro, resultó que eran diseñadores. Al descubrirnos esa coincidencia, mis recomendaciones fueron mucho más acertadas: tiendas, museos, exposiciones o simplemente sitios interesantes para miradas acostumbradas a mirar de una forma determinada. Cuando volvieron a sucasaenmadrid me mandaron un librito precioso con una animación de un desayuno, que (casualidad) habia comprado en mi librería favorita. Volvieron en fin de año con unos amigos, y com una pequeñita en la tripa de Yami. Seguro que uno o dos de los papeles enterrados bajo el acebo del jardín hablan de ella, que en esos momentos se iba a llamar Lola.

El día 11 llegaró a casa Mariano, un primo de Yami que vive en París y venía recomendado por ella. Ese mismo día nacía Olivia, la hija de Yami y Dani que no se ha llamado Lola y que es preciosa:


Estos días pasados no estaban siendo precisamente alegres. La paz en la que normalmente vivo se ha visto asaltada por un par de marchas inesperadas en pocas semanas. En esta espiral de nuevas ausencias, llegadas como la de Olivia hace 3 días, o la de Blanca hace 3 meses se convierten, al pensarlas, en motivos de sonrisa permanente.

El 12 de septiembre vamos a celebrar en casa el cumpleaños de Lola. Y que Olivia tiene 2 meses, Blanca 5, . . . y todos sonriendo!

domingo, 1 de junio de 2008

nointeresa

Para variar llevo mucho sin escribir, pero me voy a desquitar un poco. Lo primero que tengo pendiente es contar una mala experiencia pasada en micasa que como todo, terminó por ser buena, al menos porque me ha dado pie a contarlo aquí, y de paso, explicar un poco más cómo es esta mitucasa. Para evitar de alguna forma futuras sorpresas.

Experiencia de hace algo más de un mes. Reserva de una pareja de españoles que querían venir de sábado a miércoles, pero como no había sitio, pasaron primero por Sintra y reservaron desde el domingo. Como siempre, pregunto a qué hora aproximada llegarán. Me responden que a media tarde. El mismo día llaman para decir que llegarán a última hora de la tarde, con lo que mis planes de cena temprana con un amigo tienen que cambiar para una cena más tardía. Llegan a las 9 de la noche. Abro la puerta y me encuentro una pareja con bastante mala cara: se habían perdido y no sabían el número de la calle -algo que ocurre de vez en cuando aunque envíe un plano de cómo llegar con la dirección exacta-. Les dejo instalados en su habitación y me voy a cenar. Lo primero que comento a mi amigo es que he tenido una sensación extraña con ellos, que no son "de micasa", que creo que se han equivocado. Él, que me conoce, me dice "bueno, pues si se han equivocado, ya se irán o cambiarán de idea".

Bajan a desayunar los últimos, cerca de las 11, con cara de pocos amigos. Les pregunto "¿habéis dormido bien?" Responde ella mirando al suelo "pues no, yo he dormido fatal, me han despertado unos pájaros cantando esta mañana de lo más desagradables" (aclaro que no dijo "un gallo", luego fueron los pájaros "desagradables"). Yo, sin inmutarme, con mi sonrisa, ni caso, pensando para mis adentros "efectivamente, se han equivocado, a ver si el desayuno les endereza, aunque ¡para lo mal que han dormido, qué tarde se han levantado!", y me subo a trabajar mientras desayunan. Al cabo de un rato sube Vera (que me ayuda en casa) y me dice que quieren hablar conmigo. Sin mirarme a los ojos ni una sola vez, con la misma cara de pocos amigos, me dice él que están muy a disgusto, que esto no es para nada lo que esperaban, que no es un hotel, sino una casa particular y con mucha personalidad, que la ducha está rota y la habitación llena de hormigas. Lo primero que me sorprende es que hayan esperado media hora para contarme esto, sobre todo lo de las hormigas, y que si la ducha está rota, tengan el pelo mojado, pues imagino que no se habrían podido duchar. Sin darme tiempo a responder, siguen con que ellos habían reservado una habitación doble y esperaban tener lo mínimo que se tiene en un hotel, y que preferirían marcharse. Ahí ya sí me dejan intervenir para, obviamente, decirles que por supuesto, se vayan cuando quieran. Añado que la ducha estaba impecable al arreglar el baño (me había tocado a mi hacer ese baño, cosa que no sucede casi nunca, así que no me la podían colar), y que lo de las hormigas no lo había visto al arreglar la habitación, pero que lo sentía muchísimo. Remato la faena diciéndoles que ya me había dado cuenta cuando llegaron de que esta no era sucasa, que no les gustaba y que se querrían marchar rápido, les pregunto qué esperaban después del cruce de correos que explican creo que con bastante claridad de qué va esto, y les pregunto si alguna vez en su vida habían estado en un bed&breakfast. Me dicen que no, que sólo han estado en alguna casa rural, y que si, en mis correos digo que es mi casa, pero que nunca se habrían imaginado que se me ocurriera alquilar una habitación en la que hubiera una foto de mis sobrinos y libros con anotaciones mías. Obviamente me piden que les devuelva la parte del depósito que se supone que cuando se cancela con menos de 48 de antelación no se devuelve. Evidentemente les digo que si, que por supuesto, que me subo a hacer la cuenta mientras preparan sus cosas. Subiendo la escalera pienso "qué bien, qué gusto pagar a alguien para que se vaya de esta casa".

Media hora después bajan con su maleta, les doy el dinero, y, mirándome por primera vez a la cara, me dice él "por cierto, el desayuno estaba bien". Por suerte se marchan sin más. Cuando subo a la habitación veo que han destrozado la ducha, es decir, han arrancado de cuajo la manguera de la pared, y deben haber dado un buen golpe a la ducha, porque está partida por la mitad. Además la escobilla del papel higiénico está también rota en dos. Y lo mejor de todo: junto al ventanal de la habitación, en el suelo, hay unos restos de bocadillo y de fruta, festín de un ocupadísimo y feliz batallón de hormigas, en el resto de la habitación, ni rastro.

¿Por qué lo cuento? porque explica muy bien lo que es y no es micasaenlisboa. Hace un año estaba de obras, terminando de colocar la escalera que sube a la buhardilla, y haciendo el cuarto blanco. En junio se ocuparon por primera vez todas las habitaciones. En casi un año es el primer contratiempo real que ocurre en esta casa. Me parece un récord. Y me encanta que la inmensa mayoría de los que habéis venido lo hayáis entendido como es. Sé que a muchos os ha sorprendido, que os puede haber descolocado, incluso defraudado en algo. Sé que la mayoría adoráis los desayunos, y a Lola, aunque una pequeña minoría acabe harta de ella. Todos tenéis una palabra amable con Vera, Silviani o Filipa, que me ayudan cada una de una forma diferente. Esta es mi casa, y me gusta compartirla, otra cosa no interesa. Lo que interesa es que disfrutéis de esta casa y de esta ciudad al máximo. Y que os quede un recuerdo agradable. Y la certeza de que os habéis alojado en casa de una amiga que ya es de alguna forma vuestracasaenlisboa.

jueves, 3 de abril de 2008

naledih

Una de las mejores cosas de tener un blog es poder contar y colgar cosas interesantes que pasan con los amigos que andan repartidos por el mundo, aunque no pasen en micasa.
Tengo un amigo en Sudáfrica, Jose. Aunque pasen años sin vernos, está ahí, su vida avanza en paralelo a la mía y a la de todos. A veces es difícil estar al día de por dónde vamos todos, aunque estos medios ayudan bastante.
De repente ayer Jose envía un mail con la página web de su chica, que canta muy muy bien y va a empezar a actuar, y ya se sabe como es esto: cuantas más visitas a la página, mejor.
Como me ha encantado, no sólo se trata de hacerle un favor. También me apetece compartirlo con vosotros: www.naledih.com
Me he pasado un rato investigando sin ser capaz de colgar directamente "Slow", la canción que más me gusta, o un video de "Funny Valentine". Cualquier día me sorprendo a mi misma y consigo algo así.
Como siempre, que os guste . . .

viernes, 28 de marzo de 2008

otrascasasenlisboa

Acabo de añadir al blog una sección en la columna de la derecha. Tiene información sobre algunos apartamentos que estoy empezando a gestionar para alquilar por días o estancias cortas. Son todos ellos muy diferentes, de amigos que no los usan y han decidido ayudarme a hacer una prolongación de micasa, para convertirse en tusapartamentos. Cada uno de ellos tiene su propia personalidad, reflejo de la de sus dueños normalmente, como micasa refleja la mía. Están bien ubicados, unos en el centro-centro de Lisboa, en el Barrio Alto, otros en el corazón de Alfama, o en barrios muy lisboetas como Campo de Ourique o Alvalade, todos muy bien comunicados. Poco a poco se irán añadiendo algunos nuevos. Espero así que los que intentáis reservar una habitación en micasa y os encontráis que está siempre llena, encontréis un lugar agradable, cómodo, que pueda convertirse por unos días en vuestracasaenlisboa. Seguramente para muchos se convertirá en una alternativa agradable. Así lo espero. Y que os gusten.

jueves, 27 de marzo de 2008

compartiendo

El miércoles santo pasó una cosa que me encanta en micasaenlisboa. Volvía cansada de recibir a unas huéspedes en el apartamento que alquilo en Campo de Ourique. Sólo pensaba en llegar a casa, pasear a Lola, picar algo e irme a dormir. Al entrar me encontré con Miguel y Pilar, gaditanos alojados en casa desde el domingo, a punto de tomar unos quesos y un vino que habían comprado. Decidimos compartir cena y picar y beber juntos vinos, quesos y ensalada. En medio de una muy agradable conversación, aparecieron Carmen y Guillem, barceloneses que llevaban los mismos días en casa, que habían coincidido en algún desayuno, y que se unieron a la charla y a la conversación. Y media hora después, Charo y Andrés, madrileños, con los que ya había compartido algunas charlas los días anteriores. Nos dieron las 3 de la mañana. Todos queríamos irnos a dormir desde las 12, pero algo nos empujó a quedarnos, arreglando el mundo, compartiendo experiencias, oporto, mostatel y tinto alentejano. Estos momentos son de lo mejor que pasa en esta casa. Compartir es lo que me mueve a tener todo esto en marcha. Con esa idea he colocado en las habitaciones unos cuadernos para que cada uno escriba su experiencia de Lisboa y la comparta con los demás y de alguna forma mantenga su vínculo con esta ciudad, con esta casa y con todos los que en ella vivimos. Espero que vuestras colaboraciones se conviertan en la mejor guía de Lisboa.

sábado, 23 de febrero de 2008

vuelta acasa

Como todo buen propósito de año nuevo, no estoy escribiendo en el blog con frecuencia. Me está costando encontrar tiempo desde que volví de vacaciones. Tengo mil ideas en la cabeza y demasiado poco tiempo para ellas. Las vacaciones fueron maravillosas: San Franciscoreparador, Sirialucinante y Romantipática. Esos sería mis adjetivos para los tres destinos tan variados que he disfrutado este mes ya más que pasado.

San Francisco me ha parecido una joya por descubrir: si hubiera tenido 3 meses no me habría dado tiempo tampoco. A pesar de las horas durmiendo y descansando, diría que no he parado de caminar, ver, encontrar, ... tanto ha sido que estoy haciendo un mimapadesanfrancisco, gracias a las enseñanzas de mi anfitrión, para que quien vaya pueda disfrutar de algunos de esos descubrimientos desde aquí. ¿Parecidos con Lisboa? las cuestas, el tranvía, la luz, el puente... todos ellos físicos ¿Diferencias? la organización, que todo está bien cuidado y limpio, los parques impecables, la gente que se para a hablar contigo en cualquier sitio... todos ellos conceptuales. Pero no se trata de comparar, sobre todo porque leyendo esto, nadie entendería porqué prefiero Lisboa a cualquier otra ciudad, será que la combinación de esta luz mágica con el desorden y la decadencia me van.

Sirialucinante: 8 amigas gaselas con ganas de disfrutar recorriendo a golpes de maomeno uno de los más puros middle east countries ha sido una experiencia irrepetible. La decadencia de Damasco llena de rincones para descubrir, las carreteras polvorientas transformadas tras una nevada, amanecer en Palmira entre ruinas o caminar en medio del campo de Afamia a lo largo de una avenida de 2 km de columnas romanas no son experiencias cotidianas. Y compartidas con las gaselas valen doble, o triple. Aunque lo mejor del viaje, sin duda, aparte de nuestro guía Firas alias El Fari han sido las clases prácticas de regateo y sobre todo, conocer Amar (si, con mayúsculas).

Lo más increible: darme cuenta de hasta donde pueden llegar los errores humanos, y cómo es verdad eso de que "el mundo está como está por culpa de las certezas" . . . si admitiéramos que la razón no es única ni absoluta, y que también puede estar en la opinión de los demás . . .

Y lo de Romantipática los romanos se lo han ganado a pulso: es increible que en una ciudad así de maravillosa, llena de tantos rincones preciosos y de tanto monumento despampanante, sobresalga, por encima de casi todo, la falta de cariño y amabilidad con que el romano trata a quien le visita ¿están hartos del turismo? pues tendrán que empezar a plantearse vivr de otra cosa. En los museos nadie sabe responder una pregunta en otro idioma que no sea italiano, en las tiendas te sientes invitado a marcharte antes que preguntar cualquier cosa, los cafés son cualquier cosa menos acogedores, sólo algunos restaurantes se salvan: cuando deciden ser simpáticos, pueden batir récords. El problema es que muy pocos se lo plantean. Seguramente te
ndré que volver en otro momento a reconciliarme: no me gusta estar a malas con nadie, y menos con una ciudad como Roma.

¿Lo mejor de todas las vacaciones? entrar en micasaenlisboa de vuelta después de un mes fuera, a esa hora mágica del principio del atardecer, con toda la luz del fin del día inundando el salón: se me saltaron las lágrimas de la emoción en medio de un suspiro, y claro, le puse a Lola su collar nuevo de George, y nos subimos a dar un paseo a la Senhora do Monte, para sentir que de verdad habíamos vuelto acasa.

lunes, 14 de enero de 2008

micasaensanfrancisco

Estoy de vacaciones desde el 8 de enero. San Francisco es la primera etapa de mi recorrido del próximo mes. He venido a ver a mi buen amigo Bernardo que ha emigrado hace 4 meses para pasar (al menos) 2 años trabajando en la dirección de marketing de GoogleEarth y GoogleMaps. Un lujo de amigo, de acogida, de casa y de excusa! Después de pasar el primer día aclimatándome de paseo por los barrios cercanos a micasaensanfrancisco, el sábado por la mañana, tras un paseo por la playa junto al Golden Gate Park, empezó la que ha sido una excursión totalmente reparadora de fin de semana. Parada con cata de vinos y visita a bodega en Sonoma Valley, y viaje hasta Tahoe Lake, al norte de California, en la frontera con Nevada, con Bernie y con Miquela, una amiga encantadora. Ellos han esquiado. Yo he empezado, de verdad, mis vacaciones. Desconexión total en un paraiso nevado, totalmente diferente de nada de lo que podía haber imaginado que sería este mes que tengo por delante:
Un principio fantástico: no me creía capaz de desconectar de forma tan simple de micasa. Creo que, sobre todo, ha sido fundamental la acogida: que alguien con una vida tan ocupada encuentre un hueco para ocuparse de mi, y me lo ponga todo tan fácil para que disfrute, me hace recordar algunos comentarios que los que os alojais en micasaenlisboa dejáis escritos o hacéis de palabra. Mañana empezaré de verdad a descubrir porqué todo el mundo dice que Lisboa es igual que San Francisco: de momento, algún parecido encuentro . . . aunque también muchas diferencias